Mantenerse Estoico (Parte III):
Confianza en uno mismo (Self-reliance) (1841) de Ralph Waldo Emerson
es de esos audiolibros para escuchar en bucle. Elijo este manifiesto trascendentalista inconformista y neo-estoico porque es lucido, osado y sigue un estilo poético de cuchillo afilado, como tiene que ser.
Este ensayo clásico tiene el mérito de insistir en la necesidad de confiar en nuestras intuiciones, pensamientos y sentimientos sin caer en la cursilería. Lo que me gusta de Self-reliance es que tiene puntos originales, me ayuda a reafirmar ideas y va hasta el final en sus argumentos.
La idea general de Self-reliance es que no hace falta leer todos los libros o consultar «oráculos» para llegar a un momento de verdad porque cada persona contiene multitudes. Emerson nota algo interesante —o por lo menos yo nunca lo había pensado así— cuando plantea que generalmente rotulamos como “genios” a aquellas personas que ratifican aquello que previamente pensábamos. En realidad estos conceptos grandilocuentes que tenemos de estos grandes Totems —llámese J. K. Rowling, Mark Zuckerberg, Richard Wagner o el vecino que se levanta a las 6:30 am para salir a correr— no son otra cosa que una proyección o un síntoma refractario que nos muestra hasta qué punto desconfiamos de nuestra propia capacidad. El problema, según Emerson, radica en nuestra obsesión por mirar hacia afuera. Esto nos hace perder de vista qué es lo que sentimos, lo que realmente pensamos y, en definitiva, qué es lo que realmente queremos:
Nuestra vida doméstica es digna de un mendigo; ni siquiera hemos elegido nuestras artes, nuestras actividades, nuestros matrimonios o nuestra religión, sino que la sociedad lo ha hecho en nuestro lugar. Somos soldados de salón. Rehuimos la difícil batalla del destino, que es donde nace la fuerza.
(pág. 29)
De todas formas, el tono de La confianza en uno mismo o Confía en ti mismo (confieso que me dan urticarias estas traducciones) es optimista. Aquí, como también en su vida, Emerson es radical: sí es posible desarrollar nuestro potencial pero, para recoger sus frutos antes es preciso hacer un sacrificio:
Ya no puedo dividirme por vosotros, ni puedo exigiros a vosotros tal cosa. Si podéis amarme por lo que soy, entonces todos seremos felices. Si no podéis, buscaré merecer que lo hagáis. No esconderé mis gustos ni mis aversiones. Confiaré tanto en que todo lo que es profundo es también sagrado que no escatimaré fuerzas en hacer aquello que el corazón me señala y me deleita interiormente. Si eres de carácter noble, te amaré; si no lo eres, ni tú ni yo nos ofenderemos con cumplidos hipócritas. Si eres auténtico de un modo distinto al mío, sé fiel a tus compañeros que yo me buscaré los míos. No hago nada de esto con fines egoístas, sino con humildad y honradez. Pronto llegaréis a amar aquello os que dicta nuestra naturaleza; si seguimos los pasos de la verdad, ella nos rescatará sanos y salvos.
(pág. 27)
La confianza en uno mismo, nos interpela respecto hasta qué punto hacemos lo que queremos y en qué medida estamos condicionados por la mirada ajena (o cómo creemos que nos juzgarán los demás). En este ensayo Emerson interpela nuestra autenticidad preguntándonos: ¿la búsqueda de aceptación se está llevando lo mejor de ti? y, ¿en qué momentos te olvidas de ti mismo?
Adjunto una versión para descargar en MP3, el libro en PDF, la visión original en YouTube y, de yapa, para aquellos que quieran saber más sobre la vida de Emerson, un documental bastante interesante sobre su vida (este último está en inglés).
Fabuloso Gracias Diego!
El mié., 2 sept. 2020 a las 12:40, Ps. Diego Durán () escribió:
> Ps. Diego Durán posted: » Confianza en uno mismo (Self-reliance) (1841) de > Ralph Waldo Emerson es de esos audiolibros para escuchar en bucle. Elijo > este manifiesto trascendentalista, no-conformista y neo-estoico porque es > lucido, osado y sigue un estilo poético de cuchillo afilad» >
Gracias, Shakeo! Intuyo que te va a interesar.
Me gustó Diego,
No conocía a Emerson., Es muy edificante y enriquecedor como desarrolla el concepto del self-reliance, además resulta muy envolvente escuchar al narrador, produce un efecto de sedación añadido al discurso., Revela mucha sabiduría.
Ese proceso de confianza en sí mismo, no es fácil sacarlo adelante, se confunde muchas veces con obstinación, soberbia y tirar para adelante contra corriente, a veces es doloroso, porque le hace a uno sentirse incomprendido por conseguir el efecto contrario al deseado en los demás, pero como ya sabemos «no hay un by-pass para el dolor»(Diego Durán)
Lo que tenemos que aprender es a reducir o eliminar el sufrimiento esteril e improductivo que provoca el malentendido.,
Posicionándonos y concediendo de paso a los demás el lugar que les corresponde en nuestro universo privado.
Aplaudo tu iniciativa Diego,
Excelent!!
Abz
Isabel, me alegro que te haya gustado el audiolibro.
Sí, supone un gran trabajo interno aceptar la propia naturaleza personal (en términos de Emerson) cuando esto supone ser juzgado o malinterpretado. Creo que la clave está en cuál es la calidad de vínculos que a cada uno le interesa tener y la capacidad para no dejarse afectar por las expectativas de los demás o lo que nosotros interpretamos que son las expectativas de los demás (estos dos aspectos pueden ser bastante diferentes).
El texto me parece muy bueno a nivel motivacional. Desde el punto de vista filosófico cae en un error lógico (es una nimiedad, pero me parece interesante) al sostener que no hace falta leer o tomar referencia de grandes autores porque las respuestas están en uno mismo y, al mismo tiempo, empezar en ensayo con una cita, referirse específicamente a los estoicos y enumerar a tantos autores para validar su punto. A nivel estrictamente racional es contradictorio, pero insisto, esto no lo hace menos genial y siempre podrá alegarse que el texto también explicita la idea de aceptar la propia contradicción (pocas cosas más humanas).
Ya veremos qué te parecen el resto de los libros.
Saludos, donde quieras que estés.
Diego, me ha gustado mucho escuchar el audio. He de decir que el sr. Emerson me ha resultado un poco arrogante, pero seguro que a él no le importaba que lo juzgaran por decir lo que realmente pensaba ¡bien hecho! Ojalá nos pudiéramos librar de dar importancia a los juicios de los demás, a nuestros propios juicios y al vicio de juzgar. Debemos trabajar en ello. Seguro que seríamos mucho más felices y sobre todo más auténticos.
Cuando le escuchaba me salía todo el rato la palabra empoderamiento.
He encontrado ideas muy interesantes que también han dicho o que luego han desarrollado otros autores. Por ejemplo habla de la espontaneidad como fuerza de la vida. Jacob Levi Moreno, creador del psicodrama, basa toda su teoría en el desarrollo de la espontaneidad-creatividad. También habla del freno que suponen los dogmas, la cultura, la educación… a lo que Moreno llamó «Conserva Cultural», la cual cuando el ser humano es espontáneo ésta puede ser un tesoro, una guía, pero cuando pierde su espontaneidad se convierte en cárcel.
También me ha recordado ideas de los propios budistas, como vivir el presente… En un momento dado creo que dice algo así como «el deseo nos despoja del amor»… eso es muy budista. O del propio Khrisnamurti, el cual siempre nos indicaba que uno mismo debe ser su propio maestro.
Por último, decir que me ha resultado muy curioso escuchar a un hombre del siglo XIX hablar de la tecnología, de cómo ésta nos debilita. Si nos viera ahora lo dependientes que somos de ella igual le daba un patatús… o se quedaba fascinado de todo lo que el ser humano puede llegar a desarrollar.
Una gozada Diego!! Me ha resultado muy estimulante. Tanto que mira que rollo he metido, pero tú tienes la culpa por dar pie a que te comentara lo que me había parecido jajaja.
Un abrazo!!
Sí, sí, bien notado! Emerson –como tantos otros, incluyendo a Jung– han utilizado conceptos fundamentales de las filosofías orientales para desarrollar su cosmovisión occidental. «Sincretismo de la psique», diría Carl Gustav.
De acuerdo, de alguna forma me gusta que tenga un tono que pueda parecer «arrogante», nos enseñaron eso, a no creer en nosotros mismos y dudar de quien sí lo hace (exceptuando a los narcistas patológicos, claro).
A propósito, «el deseo nos despoja del amor» es una gran frase.
¡Qué bueno que te haya gustado el audiolibro! Asumo por completo mi responsabilidad, gracias por el feedback. Me entusiasma confirmar que compartir contenido que me ha ayudado a mi, también puede ayudar a otras personas.
Abrazo desde Royat, Francia.